La propuesta se fundamenta en la urgencia de impulsar la producción sostenible de biometano como parte esencial de la transición hacia una energía más limpia y resiliente.
Se ha tenido en cuenta el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) de España, que contempla medidas para promover el desarrollo del biogás y del biometano, así como los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) que incluyen duplicar la producción de biogás para 2030.